¿QUÉ ESTÁ PASANDO EN TURQUÍA?

Tomado de http://www.elidealgallego.com/articulo/mundo/un-joven-que-levantaba-una-barricada-es-la-primera-victima-mortal-de-las-revueltas-en-turquia/20130603234508132101.html

¿Nueva primavera árabe?  ¿Indignados al modo 15 M? Al parecer, y según las noticias que recibimos, una mezcla de ambas cosas.

Todo comienza en la plaza Taksim, en el Estambul occidentalizado. Un grupo de personas comienza a protestar por la construcción de un aparcamiento y un centro comercial que restará zonas verdes en una zona especialmente edificada.

Las manifestaciones se suceden mientras el presidente se encuentra de viaje por el Norte de África, radicalizándose ante las cargas policiales (más de 900 heridos y 1000 detenidos) y las declaraciones del presidente que les denomina terroristas.

La revuelta parace cobrar cada vez más fuerza, pues el centro comercial sólo es la gota que colma el vaso.

El actual gobierno del partido islamista moderado AKP (encabezado por Erdogan) lleva ya diez años en el poder, sustentado por una amplísima mayoría (50%) que tiene sus bases, especialmente, en la Turquía rural.

Bajo su poder Turquía ha tenido un espectacular crecimiento económico basado en la inversión extranjera a través de privatizaciones y aperturas de mercados. Un crecimiento indudable en las cifras pero bastante poco repartido en la población (debido a su corte neoliberalista) que ha desatado, además, burbujas especulativas

Por otra parte, su islamismo se ha ido lentamente radicalizando como puede ver cualquier visitante que haya visitado Estambul con estos años de diferencia (Son simples signos pero hace una década eran impensables en el cosmopolita Estambul la gran cantidad de pañuelos, el repiquetear de los cantos de los muecines, las tasas cada vez más gravosas al alcohol…).

El poder está perdiendo su visión civil para inmiscuirse en los campos de la moral y la vida cotidiana, ingresando cada vez más en las escuelas, las televisiones y las calles… como si la revolución de Ataturk fuera poco a poco diluyéndose también en las metrópolis como Estambul o Ankara, tal y como ocurre de una forma más radical en las zonas rurales, especialmente las más pobres, como Orham Pamuk retrató de forma tan magnífica en su obra Nieve de la que ya hablamos aquí (sumamente recomendable para entender esta doble alma turca en donde la modernidad es, a menudo, una simple máscara en donde sobreviven).

Ante ello (y unos acusados medios de comunicación que se han aliado al poder) son especialmente jóvenes los que protestan de forma cada vez más violenta. Veremos cómo evoluciona